"Le temo más a la situación económica que al virus"
La técnica de la Agencia de Colocación, Nieves Romero, ha atendido a más de 1.000 personas en estas semanas de confinamiento
“Al principio fue una avalancha. Los primeros días de teletrabajo fueron un poco caóticos porque había muchísima confusión, ya que se habían cerrado las oficinas de prestaciones y los teléfonos facilitados por la Junta de Andalucía estaban colapsados. La dirección provincial nos facilitó unos teléfonos de información y nos fueron informando de los pasos a seguir para solicitar prestaciones, y de esta manera ayudar a los que se habían quedado sin trabajo porque habían sido despedidos por la situación de alarma, o a los que se les había cumplido el contrato y no se lo habían renovado, o a los que su empresa los había incluido en un ERTE sin más información”. Así explica la técnica de la Agencia de Colocación de Albolote, Nieves Romero, estas semanas de teletrabajo. “He atendido una media de 25 llamadas diarias de Albolote y de otros municipios como: Peligros, Maracena, Atarfe, incluso llamadas de Granada, ya que durante muchos días ha habido un vacio importante de información y de cambios con respecto a la petición de prestaciones. En las primeras semanas de confinamiento había mucha incertidumbre, necesidad de información sobre ayudas y alternativas para cientos de personas que se han quedado sin trabajo. La destrucción de empleo está siendo masiva. Y hay que dar respuesta a estas personas que en muchos casos se quedan sin medios para vivir”.
Aunque la Agencia de Colocación aún no dispone de los datos de demandantes de empleo del mes de abril, los de marzo ya ponen de manifiesto un aumento preocupante del paro. En los catorce días de estado de alarma de ese mes subió el desempleo en Albolote en un 23 por ciento, pasando de 2.153 a 2.646 demandantes de empleo. Para Nieves Romero“palpar esta realidad y poner nombres y situaciones familiares concretas a cada uno de estos parados está siendo muy duro. Muchos días me sentía con una gran ansiedad por ver estas situaciones vitales tan difíciles. Al principio me preocupabamucho la salud y el contagio del virus pero ahora mi principal preocupación son estos desempleados y su futuro. Le temo más a la situación económica que la virus. Por otro lado es satisfactorio poder ayudar a estos desempleados para que puedan recibir una prestación o puedan conocer exactamente su situación y las alternativas”.
En estos meses de confinamiento la Agencia de Colocación ha centrado su actividad en la información a los desempleados. “Sacar citas para prestaciones para que el Sepe llame a los usuarios para solicitar las prestaciones, rellenar solicitudes provisionales de acceso a la protección por desempleo, informar sobre la prestación contributiva por desempleo después de un despido o por terminación de contrato, el subsidio por desempleo por despido y sin cotización suficiente para la prestación contributiva, finalización de la prestación contributiva, subsidio y renta agraria, declaración anual de rentas en sepe y la prorroga semestral del subsidio por desempleo”, explica Nieves Romero . Pero sin duda uno de las principales preocupaciones en estas semanas ha sido obtener información de lo que significa un Expediente de Regulación de Empleo Temoral (ERTE). “quieren saber en qué situación laboral quedan como trabajadores, si los puede despedir la empresa y qué ayudas pueden recibir”.
La Agencia de Colocación mantiene contacto con empresas de limpieza, supermercados, transporte y agrícolas para saber si necesitan empleados. Se han recopilado números de teléfono que se han publicado en el facebook del OAL para distintas campañas agrícolas sobre todo del arándano y la franbuesa y de la bolsa de trabajo de ASAJA.
Nieves Romero espera que “cuando acabe el estado de alarma y vuelva a funcionar aunque sea parcialmente la economía trabajemos todos juntos y que todas las ofertas de empleo se canalicen a través de la Agencia, que las empresas nos conozcan y sepan que estamos aquí con 20 años de experiencia para llevar a cabo una mediación gratuita y profesional”.
La iniciativa se materializará gracias a una subvención de la Junta de Andalucía de más de 300 mil euros
Treinta personas desempleadas se forman, durante un año, en informática y administración
