IU llevó al pleno la pérdida de servicios en la oficina de Caixabank
La formación de izquiedas considera que se está perjudicando gravemente a los vecinos y vecinas de Albolote
Tras los últimos ajustes producidos en la entidad financiera Caixabank debidos a la fusión entre Caixa y Bankia, en el municipio de Albolote se cerraron dos oficinas de estas entidades, mientras se reajustaron los servicios que se ofrecen en la oficina que permanece abierta. Ese reajuste de servicios limita mucho las operaciones bancarias que se pueden realizar en la misma, teniéndose que desplazar la clientela alboloteña a Peligros, Atarfe o Maracena para la realización de algunas operaciones de caja, al igual que las asociaciones o colectivos que tienen cuentas mancomunadas.
Desde Izquierda Unida se considera que "es un menoscabo para nuestro municipio el cambio en los servicios ofrecidos por esta entidad financiera a la vez que un inconveniente para la ciudadanía, recordando su carácter de servicio público y el hecho no menos importante, de que un 16% de Caixabank pertenece al Estado a través del FROB. De la misma manera, el Ayuntamiento de Albolote es cliente de esta entidad, teniendo un importante depósito económico y realizando gran cantidad de operaciones a través de la misma".
Según explica la formación de izquierdas en una nota de prensa, "la propuesta de IU era sencilla: “Realización de las oportunas gestiones con Caixabank para la recuperación de los servicios perdidos garantizando que cualquier cliente de Albolote podrá realizar en la oficina sita en nuestra localidad las operaciones que necesite sin necesidad de trasladarse a otro municipio” En el pleno municipal todos los grupos municipales, excepto PP y Ciudadanos, incomprensiblemente, apoyaron la moción, comprendiendo que las respuestas obtenidas hasta este momento por el gobierno municipal no pasan de ser un “trágala”. Se desarrolla el modelo de oficinas “store” en Caixabank que plantea un modelo de negocio en el que se impone la banca digital y el uso del cajero, lo que dificulta sobremanera la accesibilidad a multitud de personas, con el objetivo principal de ahorrar costes, reduciendo personal y cerrando oficinas. ¿Dónde queda la responsabilidad social corporativa?, ¿dónde la lucha contra la exclusión financiera?. Simplemente, como siempre, la banca gana y la ciudadanía paga".
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